Mi ruido tiene bordecitos amarillos
con sabor a mantequilla
pero nunca dice nada
como antes.
Es inútil buscar algún sonido
en el techo que esta tarde
tiene gafas oscuras
y se viste de lluvia
y azul.
Un deseo de aquí
una memoria de allá
psicoanálisis lacaniano
con vodka y rock and roll.
Es inútil buscar sonidos colores
ellos se fueron
con sus figuras de colección
con su olor a ratón entre copas
y dejaron este laberinto
de ciudad
y este lápiz verde
que siempre quiso ser
un gato.
notas muertas
"te alejas de los nombres que hilan el silencio de las cosas"
sábado, abril 23, 2011
martes, abril 19, 2011
Como una gota de sed
Aprender a perseguirte hasta en el parpadeo
de una luz en la persiana
en ese tibio placer de una lámpara encendida
a mediodía
Esconde tu espanto:
el deseo es una gota de hambre
en la sed que nos bebemos
de una luz en la persiana
en ese tibio placer de una lámpara encendida
a mediodía
Esconde tu espanto:
el deseo es una gota de hambre
en la sed que nos bebemos
lunes, abril 18, 2011
Poema inexacto
Vuelven de todos lados para cubrirnos de polvo
de esa sustancia que abunda en los sueños
y en el delirio.
Ahora los ojos están repletos
la sed es la misma, ese caracolillo que muerde
que nos ensucia
la foto vacía, la sábana, el café con galletitas
el tiempo que se nos mete entre la ropa.
Vuelven de salto en salto
para escapar del gritito feroz
de ese segundo exacto donde me tiendo
a esperar que la distancia
me tome por sorpresa.
de esa sustancia que abunda en los sueños
y en el delirio.
Ahora los ojos están repletos
la sed es la misma, ese caracolillo que muerde
que nos ensucia
la foto vacía, la sábana, el café con galletitas
el tiempo que se nos mete entre la ropa.
Vuelven de salto en salto
para escapar del gritito feroz
de ese segundo exacto donde me tiendo
a esperar que la distancia
me tome por sorpresa.
miércoles, octubre 13, 2010
Persianas para ocultar otoños
Mira si aquí las estaciones son como en los libros
de ciencias naturales, como en las fotos o las postales
que nunca supimos intercambiar.
Siempre vuelves con ellas, vuelves en el vaivén de los tallos
y las pendientes, sabes llegar en la naturaleza muerta
que acelera las persianas de mi habitación
o en los paseos de noche que jamás nos acercan.
El otoño se cayó de todos los muros, desde todos los hombros
(eso también te va muy bien pero ni modo)
las vueltas son las mismas
y no vale urdir un plan para acabar con las ventanas.
Déjalo así, las cosas no se arreglan, el viento sigue frío
a nadie le importará tomarse una distancia
cuando el ancho de la acera es de otro mundo.
Cuando estamos de regreso, como siempre.
El otoño se cayó desde todas las sonrisas,
caracoleando, mirando de soslayo al corazón
que termina enroscado bajo el mismo
aguacero de trapo
en la confluencia más sincera de rincones
o de parques con piletas y palomas
detalles que no pueden faltar
si queremos seguir siendo
lo que nunca pudimos.
de ciencias naturales, como en las fotos o las postales
que nunca supimos intercambiar.
Siempre vuelves con ellas, vuelves en el vaivén de los tallos
y las pendientes, sabes llegar en la naturaleza muerta
que acelera las persianas de mi habitación
o en los paseos de noche que jamás nos acercan.
El otoño se cayó de todos los muros, desde todos los hombros
(eso también te va muy bien pero ni modo)
las vueltas son las mismas
y no vale urdir un plan para acabar con las ventanas.
Déjalo así, las cosas no se arreglan, el viento sigue frío
a nadie le importará tomarse una distancia
cuando el ancho de la acera es de otro mundo.
Cuando estamos de regreso, como siempre.
El otoño se cayó desde todas las sonrisas,
caracoleando, mirando de soslayo al corazón
que termina enroscado bajo el mismo
aguacero de trapo
en la confluencia más sincera de rincones
o de parques con piletas y palomas
detalles que no pueden faltar
si queremos seguir siendo
lo que nunca pudimos.
miércoles, setiembre 29, 2010
Hablo por la boca pintada del silencio
Sí, quédate despacito
titilan las lámparas y el espacio
es un cuaderno nuevo donde esconder
las arrugas
quédate otra vez con las armas
las inventoras de lo vedado
las maravillas de una noche ebria
que da tumbos en la mitad
de la sangre
quédate con las cenizas
y que el cielo sea el mismo cielo
que pisamos en Lima
ese que hoy
todavía
nos revienta la boca con silencios
titilan las lámparas y el espacio
es un cuaderno nuevo donde esconder
las arrugas
quédate otra vez con las armas
las inventoras de lo vedado
las maravillas de una noche ebria
que da tumbos en la mitad
de la sangre
quédate con las cenizas
y que el cielo sea el mismo cielo
que pisamos en Lima
ese que hoy
todavía
nos revienta la boca con silencios
miércoles, setiembre 15, 2010
Bajo cielos australes
Los agujeros ya los jugamos todos, los perdimos
You know
Aquí nadie nos dijo quédense
huyan
El café no era el mismo en cada sombra
Hoy se atrapan los espejos en una correspondencia
De caminos opuestos para hormigas
O algo similar
Mientras la sangre sube y baja
Y sube nuevamente
Segundo piso Washington Bridge
East Coast y la llamada internacional
Como un eclipse que se interpone
Cortando líneas
Abriendo fuego entre sus brazos
Bajo el párpado de otro cielo más allá del suyo
Y del mío
Donde jugamos más agujeros
Como dinero ficticio
Como relojes de arena
En las playas de dioses menos reales
You know
Aquí nadie nos dijo quédense
huyan
El café no era el mismo en cada sombra
Hoy se atrapan los espejos en una correspondencia
De caminos opuestos para hormigas
O algo similar
Mientras la sangre sube y baja
Y sube nuevamente
Segundo piso Washington Bridge
East Coast y la llamada internacional
Como un eclipse que se interpone
Cortando líneas
Abriendo fuego entre sus brazos
Bajo el párpado de otro cielo más allá del suyo
Y del mío
Donde jugamos más agujeros
Como dinero ficticio
Como relojes de arena
En las playas de dioses menos reales
Jet-Lag
Estos vasos nuestros saben de orillas y azares
Donde se multiplica la culpa y la pena llega con el correo
De ayer
Recuerdas, la humedad era la tinta de los lápices
La cigarra el viento frío de otro suicida limeño
La luz en la cara, el humo que no disipa que no disipa
Que se detiene entre tu mano y el otro lado
Donde postergas los papelitos
La billetera
Mírame, una voz mientras me pongo la pirueta
Debajo del mantel donde tejías esos gestos del almuerzo
No son pantallas, querida, no son postes ni cegueras
No nos separa un océano
Es esta ventana
Que no deja de recordarme
Que entre tú y yo
Yo y tú
La distancia
Síndrome de esas cosas que se suceden
No tiene fecha de caducidad
Donde se multiplica la culpa y la pena llega con el correo
De ayer
Recuerdas, la humedad era la tinta de los lápices
La cigarra el viento frío de otro suicida limeño
La luz en la cara, el humo que no disipa que no disipa
Que se detiene entre tu mano y el otro lado
Donde postergas los papelitos
La billetera
Mírame, una voz mientras me pongo la pirueta
Debajo del mantel donde tejías esos gestos del almuerzo
No son pantallas, querida, no son postes ni cegueras
No nos separa un océano
Es esta ventana
Que no deja de recordarme
Que entre tú y yo
Yo y tú
La distancia
Síndrome de esas cosas que se suceden
No tiene fecha de caducidad
domingo, mayo 24, 2009
shadows
Como toda estación ajena a tus encuentros
para bien regocijarse al otro lado, donde algo
arenas para esconder un atajo
retroceder y la sal en todos los vasos
y la herida que jamás nos recupera
horas perdidas
en el abismo que me abren tus labios
como la flor secreta que arrastra todo límite
van cayendo las noches como ventanas cerradas
escombros para tejer una sombra
lejos, detrás de esa brillante claridad
incandescente
para bien regocijarse al otro lado, donde algo
arenas para esconder un atajo
retroceder y la sal en todos los vasos
y la herida que jamás nos recupera
horas perdidas
en el abismo que me abren tus labios
como la flor secreta que arrastra todo límite
van cayendo las noches como ventanas cerradas
escombros para tejer una sombra
lejos, detrás de esa brillante claridad
incandescente
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